10/12/08

siempre que pienso en dictaduras pienso en psicoanálisis: argentina es un país que, pese a su juventud, padeció cinco abusos en su infancia. como todo abuso, el fantasma del golpe parece ser un trauma al que la historia de esta región vuelve de forma patológica una y otra vez. hoy, veinticinco años después, nuestro país sigue, como puede, este camino de la democracia. y, volviendo al psicoanálisis, si hay algo que también aprendimos de Freud es que las heridas se curan hablándolas: terapia es, básicamente, cura por la palabra. palabra que, a su vez, es base de toda democracia. alfonsín veinticinco años atrás decía: "con la democracia se come, se cura y se educa". una frase que, al menos hoy, estaría bueno pensarla.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

cada dia me gustan mas tus post!!!
te extraño nenee...volve rapido...jeje
nos quedo una salida pendiente a todos juntos.

espero la estes pasando lindo!!!

besotes comunicologos!!!

=)

j. dijo...

AAAh, comunicación social, no sé por qué pensé que Filosofía. Será por cierto viaje.

El tema es que los argentinos no terminemos como esos abusados que luego se transforman en resentidos en la adultez. WAIT A MINUTE! ¿no está pasando acaso?

tarde,
o, temprano, todo depende.